Y justo cuando la oruga pensó que era su final, se transformó en mariposa

martes, 27 de septiembre de 2011

¿Para cuándo?

Razas diferentes, comidas, idiomas, costumbres.

Religiones diferentes.

Buscando el acorde correcto armonizan entre sí.

Musulmanes y Cristianos, Cristianos y Judíos, Judíos, Hindúes...

Cuando esto no es así, se produce distorsión.

Judíos, Hitler, Auswitchz, los hornos, el fuego.

La lluvia, una nueva oportunidad.

Los niños.

Judíos y Musulmanes, Musulmanes y Cristianos y Judíos...

Un Mundo separado por el mismo Dios.


Fue compuesto por Nacho Cano entre octubre de 1992 y mayo de 1994 en Nueva York y grabado y mezclado durante el verano de 1994 entre Londres, Madrid y Ámsterdam.
En el álbum se escuchan muchas grabaciones hechas en distintas partes del mundo. La grabación del tema El patio, que fue el primer single y en el que participa la niña Macarena, sobrina de Nacho Cano.




lunes, 26 de septiembre de 2011

sábado, 24 de septiembre de 2011

El Mayor Remordimiento


En una fiesta empezamos a conversar sobre las cosas de las que nos arrepentíamos en la vida.
-Ojalá no hubiera desperdiciado el tiempo - señaló alguien.
-Yo me arrepiento de no haber aprovechado más la escuela -comentó otra persona. Todos dijeron lo que más lamentaban, menos un hombre que escuchaba sin decir palabra. Pero como queríamos conocer su historia, insistimos en que nos la contara y, después de un largo titubeo, se dispuso a hablar con la voz entrecortada.
-Nací en un pueblo situado frente al mar. Mi padre era pescador y siempre trabajó incansablemente para sostenernos. Aunque mi familia no tenía buena posición económica, los siete que la integrábamos éramos felices.
Hizo una pausa mientras venían a su mente aquellos viejos días.
-A pesar de dedicarse a un oficio tan duro, mi padre mostraba mucha ternura. Cuando el mal tiempo le impedía lanzarse al mar, me llevaba a la escuela en un viejo camión que usaba para transportar pescado. La verdad es que eso me avergonzaba. Pero él no lo notaba y detenía el camión frente a la escuela. En cuanto se bajaba, yo me moría de vergüenza. Me imaginaba que todos se fijaban en el destartalado vehículo.
El hombre interrumpió su relato, dio un largo supiro y continuó.
-Luego me revolvía el pelo y decía: 'qué tengas un buen día, hijo', y me daba un beso en la mejilla. Le daba un gran beso al chico que ya iba en cuarto año... Decidí que ya nunca más me daría ese beso de despedida.
"Aquel día estaba nublado, y el mar, embravecido. Como de costumbre, mi padre estacionó su camión frente a la escuela, Bajó de él y cuando me iba a dar el beso le grité, rechazándolo:
"- ¡Ya no quiero que me des besos de despedida! ¡No soy un bebé!
"El rosto de mi padre se entristeció. Se me quedó mirando y se le arrasaron los ojos. Fue la primera vez que lo vi llorar. Tal vez fui la única persona que vio las lágrimas de mi padre".
Entonces al hombre mismo se le llenaron los ojos de lágrimas.
-Mi padre trató de contener el llanto y comentó: 'Bien, ya estás bastante grande, y ya no quieres mi beso de despedida'. Subió a su bote y se lanzó al mar. Jamás regresó. Mi mayor remordimiento, de lo que más me arrepiento, es no haber aceptado el último beso de despedida de mi padre.
" ¡Daría lo que fuera porque me diera ese beso ahora!".

viernes, 23 de septiembre de 2011

Otro otoño.




Callarán hasta las ramas de los sauces
que rodean la que fue nuestra casa.

Las hojas del otoño 
caerán mudas en noviembres infinitos
y su caída
será lluvia silenciosa
teñida de ocres amarillos.

El viento será complice
de este crimen pasional de otoño
y a partir de entonces
entre tu bosque y el mío
un desierto mudo 
crecerá como enredadera eterna.

Las palabras entre nosotros
serán recluídas en la libertad que nos prestamos
y una vez nos abandonemos
no habrá tortura
ni garrote vil
que fuerce una queja
ni siquiera un crujido de lamento
capaz de despertar este sonido de silencio
y esta distancia planetaria.
(No sé el autor)

martes, 20 de septiembre de 2011

El ángel

Cuenta la antigua leyenda que un niño que estaba por nacer le dijo a Dios:

-Dicen que me vas a enviar mañana a la tierra pero ¿cómo viviré tan pequeño e indefenso como soy?
-Entre muchos ángeles te escogí uno para ti, que te está esperando, él te cuidará.
-Pero dime, aquí en el cielo no hago más que cantar y sonreír, eso basta para ser feliz. Y ¿cómo entender lo que la gente me hable, si no conozco el extraño idioma en que hablan los hombres?
-Tu Ángel te dirá las palabras más dulces y más tiernas que puedas escuchar y con mucha paciencia y cariño te enseñará a hablar.
-Y ¿qué haré cuando quiera hablar contigo?
-Tu Ángel te juntará las manitas y te enseñará a orar.
-He oído que en la tierra hay hombres malos ¿Quién me defenderá?
-Tu Ángel te defenderá aún a costa de su propia vida.
-Pero estaré siempre triste porque no te veré más Señor.
-Tu Ángel te hablará de mí y te enseñará el camino para que regreses a mi presencia, aunque yo siempre estaré a tu lado.

En ese instante una paz reinaba en el cielo, pero se oían voces terrestres y el niño presuroso repetía suavemente.

-Dios mío, si ya me voy dime su nombre. ¿Cómo se llama mi ángel?
-Su nombre no importa; tú le dirás MAMÁ...



lunes, 19 de septiembre de 2011

Tiempo de silencio

“Las lágrimas más amargas que se derraman sobre nuestras tumbas son por las palabras nunca dichas y las obras inacabadas”.  Harriet Beecher Stowe.


sábado, 17 de septiembre de 2011

Como plantar una semilla


Leyenda india del amor.
Estando un viejo Lakota fumando en su tipi, mientras meditaba sobre los problemas que acarreaba su tribu; comida, tierras robadas por los rostros pálidos, etc. entró en la tienda un joven de la tribu y le dijo:
- “Abuelo, me siento muy mal.”
- “¿Qué te ocurre, hijo mío?”; preguntó el anciano.
- “Mi corazón palpita tan deprisa cómo si quisiera escapar de mi pecho, mi estómago no cesa de hacerme cosquillas a cada momento, mi mente no deja de pensar en una sola cosa de día y de noche, no puedo dejar de pensar en Llanura Iluminada, la hija de Búfalo Cansado, ni un sólo instante. Cuando la veo, no ceso de sudar, me tiemblan las piernas como si fuese a una batalla y mi cuerpo entero suda; hasta mi voz se vuelve temblorosa”.
- “Entonces estás enfermo”; contestó el abuelo, ofreciendo su pipa al joven. “Ven, siéntate aquí a mi lado y fuma conmigo mientras meditamos sobre eso.”.
El muchacho obedeció y estuvieron hablando, pensando y meditando sobre el tema y fumando de la pipa durante un buen rato.
-”¿Qué enfermedad tengo, abuelo?”. Preguntó el joven Lakota.
Tras una larga fumada de su pipa, el abuelo le contestó: “Amor, muchacho, padeces amor”.
- “¿Es eso malo?”
- “No”, le dijo el anciano Lakota. “No es malo, si lo sabes administrar en su medida justa.”.
- “¿Cómo lo hago?”.
- “Muy fácil, escucha tu corazón, él te dirá lo que debes hacer en cada momento, hazle caso en todo lo que te diga, entonces, sólo entonces, podrás volar junto a la chica  que amas, porque saldrá de tu pecho y llegará al suyo para instalarse en él. Sé tú mismo en todo instante y sé paciente. Es como cuando plantamos una semilla en la tierra, no recoges el fruto  el mismo día. Tienes que cuidarla mucho, mimarla durante un período de tiempo,  crecerá y podrás recoger aquello que sembraste hace un tiempo. Haz tú lo mismo. Cosecha tu amor en su corazón y serás correspondido. Dale todo tu amor, todo tu cariño, todas tus caricias, todo tu ser y al final, recogerás el fruto del amor.”.
Dra. Carmen González

viernes, 16 de septiembre de 2011

Todo cambia


Cambia, todo cambia. Mercedes tiene razón. A veces nos aferramos a lo que ya forma parte de nosotros sin querer ver que todo cambia. Cambiamos nosotros, cambian los que nos rodean, cambia lo que nos rodea. 
Hay que intentar adaptarse a los cambios evitando en la medida de lo posible que eso nos lastime, aprovechar el cambio para "crecer"


...Cambia lo superficial
Cambia también lo profundo
Cambia el modo de pensar
Cambia todo en este mundo...


...Lo que cambió ayer
Tendrá que cambiar mañana
Así como cambio yo
En esta tierra lejana.

jueves, 15 de septiembre de 2011

miércoles, 14 de septiembre de 2011

¡Qué mona vas!

Sales de tu casa, tan mona, pelo arreglado, maquillaje perfecto, la camisa en su sitio y la falda impecable, sin una arruga. Pasada la primera media hora, ya he llegado al trabajo, he sudado y llevo un pequeño cerco húmedo en las axilas, lo demás todavía bien. Tengo una reunión a primera hora importante y pesada, se prevee que podemos terminar pasadas las dos de la tarde, pero en fin, qué se le va a hacer. Me voy a la reunión, saludos a todos los componentes, me siento y empezamos. A las dos horas, la falda ha dejado de estar impecable, me ha dado calor y me he recogido el pelo con pinza. Tengo ya un poco de hambre, enseguida traen café y dulces y me los tomo, vaya que sí, están...buenísimos. Seguimos trabajando, me he rascado la cabeza y una greña se ha soltado del recogido, más tarde un mechón. Yo no soy consciente de esto y sigo como si tal. Trabajamos  y trabajamos. Se hacen las dos,de terminar nada de nada, la falda super arrugada, la camisa fuera ya de lugar, el calor ha hecho que el maquillaje de los ojos se salga de su sitio y le parezca un poco a la niña del exorcista. Las tres y seguimos, cansados pero seguimos, llamamos a las familias avisando de que nos vamos a retrasar. Tres y  media y aún queda, las cuatro de la tarde, un hambre de esos que te vas comiendo por dentro poco a poco, las tripas ya no saben qué cantar, casi terminamos ya. Mi mente en una cervecita fresquísima, ya estamos finalizando, ya hemos finalizado.¡Por fin! Paseo por el WC. ¡Horror! parecía que me había peleado con un gato y había perdido. La vestimenta desencajada, sudando y hambrienta. Salgo digna a la calle, me despido y tranquilamente a mi casa. Llego y la cervecita me estaba esperando, y la comida y la siesta. Total un día de trabajo un poco más largo de lo normal.

domingo, 11 de septiembre de 2011

En un bosque de hadas



Después de una semana con el corazón desgarrado ante el recuerdo de todos aquellos que murieron en el cruel atentado del 11 de septiembre de hace 10 años, me ha parecido relajante zambullirme en este bosque de hadas. Tal vez en él encontremos a aquellos y aquellas que de un modo u otro se fueron para no volver a este mundo, pero que permanecen en nuestro recuerdo por siempre jamás.

viernes, 9 de septiembre de 2011

Y vuelta a empezar

Otro curso comienza de nuevo. 9 de septiembre, 9 de la mañana. Caras nuevas, caras conocidas. Niños con la ansiedad de conocer a sus nuevos maestros, a sus nuevos compañeros. Oliendo a libros nuevos. Padres con la sonrisa en la boca, pensando que por fin comienza el cole y ya se deja de pensar en donde dejo al peque para ir a trabajar o simplemente para poder ir a tomar un café tranquilamente sin que revolotee la criatura alrededor. ¡En fin! ¡Cosas de maestros! El pan nuestro de cada día. Ahora toca de nuevo empezar a soltar ideas atractivas que haga que nuestros alumnos se ilusionen y que nosotros nos volvamos a enamorar de nuestra profesión como todos los años, año tras año. Con los malos ratos del curso anterior olvidados y con la esperanza de que aquellos que "no podían" hayan dado un pasito más en su madurez. Pues eso ¡Cosas de maestros! A todos los que como yo aman su profesión ¡Feliz curso!

domingo, 4 de septiembre de 2011

"HOY TOCA SER FELIZ"

Comienza un nuevo ciclo de vida. Como cada septiembre, de aquellos que tenemos el privilegio de disfrutar de vacaciones, comienzan los nuevos propósitos, las nuevas colecciones que ofertan las televisiones, aprender inglés(nos hemos dado cuenta de lo importante que es cuando sales de España) y sobre todo la vuelta al cole, que está un poco "caliente" en algunas comunidades, pero qué se le va a hacer es el ciclo de la vida que un nuevo curso marca.
¿Depresión post vacacional? No lo creo, es sólo romper un ritmo y comenzar otro y cuesta adaptarse como cuando se adelanta o atrasa la hora.
¡Feliz reencuentro a todos los que pasáis por aquí!