Y justo cuando la oruga pensó que era su final, se transformó en mariposa

sábado, 29 de octubre de 2011

¡Que nadie duerma!


¡Que nadie duerma! ¡Que nadie duerma!¡

Tú también, princesa,
en tu fría estancia
miras las estrellas
ue tiemblan de amor y de esperanza!

¡Mas mi misterio se encierra en mí,
mi nombre nadie sabrá!
¡No, no, sobre tu boca lo diré,
cuando resplandezca la luz!
¡Mi beso deshará
el silencio que te hace mía!

¡Noche, disípate!
¡Pónganse las estrellas!
¡Pónganse las estrellas!
¡Al alba venceré!¡Venceré, venceré!

No hay comentarios:

Publicar un comentario